
Introducción
La fascitis plantar (también llamada fasciopatía plantar, que refleja la ausencia de inflamación) es un problema común que representa aproximadamente 1 millón de visitas de pacientes por año.
La causa más común de dolor en el talón en adultos, con una incidencia aproximadamente del 10% y una mayor incidencia en mujeres de 40 a 60 años de edad. La fascitis plantar se asocia con una variedad de deportes, pero se informa principalmente en corredores recreativos y de élite (incidencia del 5% al 10%)
¿Que es la fascia?
La fascia plantar se origina en la tuberosidad calcáneo posteromedial y se inserta en cada cabeza metatarsiana para formar el arco longitudinal del pie. La fascitis plantar es una condición de uso excesivo biomecánico que resulta en cambios degenerativos en su unión al calcáneo.

¿Porqué me lesiono?
Los factores de riesgo para desarrollar fascitis plantar en no deportistas incluyen dorsiflexión limitada del tobillo, índice de masa corporal elevada y pasar la mayor parte del día de trabajo de pie.
Un estudio encontró que la reducción de la dorsiflexión del tobillo es el mayor factor de riesgo en los no deportistas. La dorsiflexión limitada del tobillo hace que el pie se sobreprone, causando que se coloque más carga en la fascia plantar. La afección también ocurre en personas más activas, como corredores y personal militar.
Los corredores y aquellos que pasan mucho tiempo de pie son más propensos a desarrollar la condición porque la fascia plantar se estira y contrae (en lo que se llama un ciclo típico de estiramiento-acortamiento elástico), y la tensión repetitiva puede causar una lesión por uso excesivo.

Figura D: Dorsiflexión o flexion dorsal ( su limitación causa mayor carga en la fascia plantar )
Además la postura del pie, en particular la altura del arco longitudinal, se ha considerado importante durante mucho tiempo en la etiología del dolor del talón plantar. Se cree que un pie plano, o pie de arco bajo, que se aplana excesivamente a través de la fase de postura de la marcha, aumenta la carga de tracción de la fascia plantar, lo que provoca un estrés excesivo en la unión al calcáneo. Los déficits en la función muscular se consideran claves en ese sostén del arco longitudinal. Los músculos intrínsecos del pie desempeñan un papel en el soporte del arco longitudinal, al igual que los músculos extrínsecos, como el tibial posterior y el peroneo largo. La debilidad en cualquiera de estos grupos musculares podría provocar un estrés excesivo.
Por otra parte la reducción de la extensión del primer metatarsiano también se considera un posible factor que contribuye al dolor del talón. La fascia plantar se coloca bajo tensión extendiendo los dígitos, por lo que la extensión reducida de los dedos podría estar relacionada con la inflexibilidad de la fascia plantar. La pérdida de extensión del dedo gordo puede, por lo tanto, estar asociada con una mayor carga de tracción dentro de la fascia plantar durante el despegue al caminar y correr, y por lo tanto, contribuir al dolor del talón plantar.
¿Qué solución tengo?
Anteriormente, los protocolos de estiramiento enfatizaban el estiramiento del tendón de Aquiles porque la falta de flexión de tobillo es un factor de riesgo para la fascitis plantar.
Sin embargo, los estudios han indicado que el estiramiento específico de la fascia plantar puede ser más beneficioso.
Un ensayo controlado aleatorio (ECA) asignó a 82 pacientes a estiramiento de la fascia plantar o estiramiento del tendón de Aquiles. Ambos grupos recibieron antiinflamatorios no esteroideos drogas y plantillas. El dolor en el talón mejoró en un 52% a las ocho semanas en el grupo de fascia plantar en comparación con el 22% en el grupo de tendones de Aquiles.
Otro estudio comparó los resultados de un protocolo de estiramiento específico para la fascia plantar frente a un programa de fortalecimiento para reforzar el tendón de Aquiles y el mecanismo de muelle de la fascia plantar. Los pacientes que se sometieron al programa de entrenamiento de fuerza tuvieron una mejoría a los tres meses mayor que el grupo de estiramiento; sin embargo, ambos grupos mejoraron.
Conclusiones
- Se ha visto un rango de dorsiflexión del tobillo significativamente reducido en los pies afectados de los corredores con dolor en el talón
- El pie plano y pronante parece aumentar la tensión de la fascia en la zona del cálcaneo.
- El entrenamiento de fuerza de la musculatura intrisenca del pie y musculos como los peroneo largo y el tibial posterior podría dotar de mayor sujeccion al arco plantar y reducir la tensión en la fascia.
- El entrenamiento para la mejora de rangos de movilidad del tobillo parece ser efectivo para el tratamiento de la fascitis plantar, en especial la mejora de la dorsiflexión.
- El estiramiento de la fascia plantar y la mejora de la extensión del dedo gordo puede ser beneficioso para el tratamiento de la fascitis plantar
- El entrenamiento de fuerza para corregir disbalances artromusculares en la articulación del tobillo parace ser efectivo en el tratamiento de la fascitis plantar.
Programa de entrenamiento y movilidad para la fascitis
Bibliografía
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